Empezamos con uno de los reclamos turísticos principales de Marruecos. Esta pequeña población situada a 1 hora de Tánger tiene un elemento muy característico: las paredes del casco histórico están pintadas de azul. Esto significa que las callejuelas y los comercios tienen un aire especial rebosante de belleza y de encanto.
La localidad se encuentra junto a la cordillera del Rif y, por ello, el entorno es de incomparable belleza. Además, es un pueblo lleno de gatitos y que, pese a que el tiempo haya pasado, se siguen manteniendo hábitos tradicionales como el hecho de lavar la ropa en los ríos.
¿Qué sería de un viaje sin conocer la naturaleza del país? NADA. Por eso, hemos incluido en este listado una de las paradas obligatorias en cualquier ruta a Marruecos: las cascadas de Ouzoud. De hecho, son las cascadas más grandes del norte de África y, por ello, es una excursión muy típica que se suele hacer desde Marrakech, ya que está a 150 km de la ciudad.
Estas cascadas son de 100 metros de altura y sus alrededores cuentan con caminos y senderos llenos de naturaleza y vida salvaje que harán que tu excursión sea aún más interesante.
Por supuesto, la capital de Marruecos también es de visita obligada, ya que cuenta con espacios arquitectónicamente impresionantes. De hecho, antiguamente era Patrimonio de la Humanidad debido a la majestuosidad de sus calles y edificios. Pese a ser la capital, es mucho más tranquila que Marrakech y para los viajeros es una auténtica maravilla porque es una ciudad imperial asombrosa y encantadora.
Además, tiene una preciosa medina de casas blancas y callejuelas estrechas que te invitará a otra época. Una ciudad que vive alejada del turismo masivo y que te mostrará una cara muy amable de Marruecos.
Otro de los mejores sitios para visitar en Marruecos es Meknès, situado cerca de Fez y que ofrece un precioso palacio que data del 1675. Aquí te maravillarás con su esencia porque ofrece un complejo arquitectónico marroquí del XVII que está muy bien conservado y que te sorprenderá.
Debido a ello, hoy en día Meknès está incluida dentro de Patrimonio de la Humanidad de la Unesco, como una de las ciudades imperiales que hay que visitar.
El Imperio romano también llegó a Marruecos y una gran prueba de ello son las ruinas de Volubilis. Esta antigua ciudad del siglo III aC fue fundada por los cartagineses y, hoy en día, sus ruinas se mantienen en buen estado, por lo que merece hacer un alto en el camino cuando estés de ruta por este país.
Se encuentra cerca de Meknès, por lo que puede ser una buena excursión combinada y, así, aprovechar al máximo tu día.
Los ksars son las ciudades que fueron fortificadas por los bereberes y, por ello, cuentan con murallas que, en lugar de estar levantadas con piedras, están hechas de adobe. Esto le confiere a estas regiones un halo totalmente único e inigualable, creando estampas preciosas y totalmente adaptadas a la naturaleza.
A 20 km de Ouarzazate nos encontramos con un ksar impresionante y de visita obligada: Ait Ben Haddou. Es una buena parada en tu camino y, sin duda, su imagen captará tu atención.
Por supuesto, otro de los mejores sitios para visitar en Marruecos es el desierto y vivir la experiencia de pasar una noche en la inmensidad de las dunas. El mejor desierto que hay en el país es el de Merzouga y, además, es uno de los más turísticos. Desde aquí, parten una gran cantidad de grupos que se adentran en camello, en quad o en 4×4 por el desierto para disfrutar de una experiencia inigualable.
Por la noche, no hay nada mejor que abrigarse bien y disfrutar de uno de los cielos más estrellados que verás jamás en toda tu vida. Ir al desierto es una de las actividades imprescindibles cuando viajas a Marruecos, así que no te lo pierdas 😉
Si quieres descubrir las playas de Marruecos, Essaouira es una de las mejores opciones que tienes a tu alcance. Se trata de una localidad con puerto y que está a 3 horas de Marrakech, por ello, es una de las más visitadas por los lugareños y por los turistas.
La ciudad está rodeada de una muralla y cuenta con una medina de casas blancas y azules que le dan ese aire playero. El ambiente de Essaoiura es muy internacional y turístico: cientos de surferos de todo el mundo viajan hasta este lugar del mundo para volar sobre las olas y disfrutar de un viaje de ensueño.
Y terminamos este repaso a los mejores sitios para visitar en Marruecos para llegar a Marrakech, una de las ciudades más conocidas y concurridas del país. Suele ser el punto de partida de muchos viajeros y, por eso, es importante que vayas preparado porque puede ser un choque cultural fuerte.
Marrakech es una ciudad con mucha, muchísima, vida. Por ello, te recomendamos que al menos te quedes un par de días para saborearla con calma. La plaza Jamaa el Fna es la parada obligatoria y uno de los símbolos del país; pero, además, también podrás conocer los palacios, las mezquitas o los muchos jardines que hay repartidos por la ciudad. ¿Lo mejor? Callejear, callejear y callejear. 
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